¿Qué es el Trastorno del Espectro Autista?
El trastorno del espectro autista se caracteriza por alteraciones persistentes en la comunicación o interacción social, así como presencia de comportamientos, intereses o actividades restrictivas y repetitivas.
Señales de Alarma para su detección temprana
6 meses:
- Menos activo y exigente que otros niños.
- No tiene respuestas sociales de anticipación, como cuando va a ser cogido en brazos.
- No busca el origen de los sonidos.
8 meses:
- Ausencia de contacto visual.
- Difícil de calmar.
- Poca interacción con juegos sencillos como “cucu-tras”.
- Movimientos motores repetitivos.
12 meses:
- Ausencia de balbuceo comunicativo.
- Ausencia de gestos, como señalar o mostrar objetos.
- No mira hacia donde le señalas.
- Falta de reacción a su nombre.
- Ausencia de imitación espontánea.
18 meses:
- No emite palabras sencillas.
- Ausencia de respuesta a órdenes sencillas.
- Ausencia de acción protodeclarativa, no comparte con otra persona lo que le gusta.
24 meses:
- No aparecen frases espontáneas de dos elementos.
- Sigue habiendo una usencia de contacto visual adecuado.
- Expresa poco afecto, puede dar un beso o abrazo de manera automática si se le pide.
- Poca exploración del entorno.
- Ausencia de juego simbólico.
- Juega a alinear los juguetes, a darles vueltas…
- Prefiere estar a solas.
36 meses:
- Irritabilidad excesiva.
- Continúan los movimientos repetitivos: mecerse, girar, andar de puntillas…
- Ausencia de sonrisa social.
- No ofrece consuelo a otros.
- Insistencia en rutinas y resistencia a los cambios.
- Hipersensibilidad a sonidos, texturas….
48 meses:
- No entiende los papeles en el juego con otros niños.
- Si hubiese juego simbólico, será repetitivo y simple.
- No combinan los juguetes cuando juegan.
60 meses:
- Entonación rara o inapropiada.
- Vocabulario inusual para su edad.
- Tendencia a hablar de forma espontáneos solo de temas específicos de su interés.
- Limitado uso del lenguaje para comunicarse.
- Ecolalias, repite todo lo que se le dice.
- Dificultades para la integración del contacto ocular con otras formas de comunicarse.
- Más orientado a adultos que a otros niños.
- Interacciones extrañas y unilaterales.
- Dificultad para unirse al juego con otros niños.
- No cumple las normas sociales implícitas.
- Intereses intensos y poco compartidos.
- Ausencia de flexibilidad y juego imaginativo y cooperativo.
- Falta de habilidades para desenvolverse en los cambios o situaciones poco estructuradas.
En el caso de que su hijo cumpla varios de estos signos, os recomendamos acudir a un especialista para su diagnóstico para posteriormente poder trabajar todos los objetivos marcados en el informe realizado.
Autora: Marta Muñoz Sánchez, Departamento de Logopedia